
20 Ene Claves para conseguir un posicionamiento de marca exitoso
Cuando decides trabajar tu marca personal, lo haces con un objetivo, hacer que tú marca personal sea un éxito, ¿verdad? Porque sino… para qué? Como se suele decir… «ir pa’ na’ es tontería!»
Por eso hoy quiero contarte las claves para conseguir una marca personal de éxito y conseguir un posicionamiento de marca exitoso. Es super importante el posicionamiento de marca en el proceso de creación, desarrollo y consolidación de tu propia marca personal.
Y es que la marca personal hay que cuidarla, y entenderla como un producto más que tienes que diseñar y desarrollar. Pero si no consigues que tu audiencia objetivo consiga entender y tener conciencia de todos los valores que propones con tu marca, sin duda habrás fracasado.
En eso consiste precisamente posicionar una marca. En trabajar en una imagen de marca que logre un posicionamiento en la mente de la audiencia a la que queremos motivar para realizar alguna acción: seguirnos, comprarnos, o cualquier otra que queramos conseguir.
En este post voy a intentar revelarte algunas claves para trabajar en un posicionamiento exitoso para tu marca personal: ¡comenzamos!
1 Tener claro objetivos y metas
Difícilmente vas a conseguir llegar a ningún sitio si no tienes clara cuál es la dirección que quieres tomar. Antes de tomar cualquier decisión acerca de tu marca personal, debes plantearte hasta dónde quieres llegar.
Tener claras tus metas y objetivos personales y profesionales, y visualizarlos con fuerza, te permitirán poder marcar aquellas etapas que debes ir cubriendo para alcanzar la meta final.
Y como te imaginas, teniendo claro dónde queremos llegar, nos ayudará a reflexionar acerca de los valores, cualidades, y características que debe tener nuestra marca personal.
Debemos dotarla de todo aquello que aporte valor al objetivo final.
Haciendo un paralelismo con un producto físico: todas sus características deben tener una utilidad acerca del uso del producto.
2 Pasión y autenticidad
Se dice que si te dedicas a algo que te apasiona, no tendrás que volver a trabajar nunca. Asegúrate que esas metas y objetivos de los que hablábamos en el punto anterior, tienen que ver con eso que te apasiones.
Repito: con eso que te apasione de verdad.
Si no sientes pasión auténtica por ello, al final va a terminar siendo detectado por tu público objetivo. O peor aún, el desarrollo de tu marca personal acabará siendo algo con un componente alimenticio que te alejará de uno de los objetivos personales fundamentales: la felicidad.
El posicionamiento de marca personal implica que deberás estar las 24 horas enfocada en aportar valor a dicha marca. No es algo que se pueda disimular o esconder. Eso no lo aguanta nadie.
Por lo tanto, asegúrate de estar alineada con algo que realmente te apasione.
3 Establece tu propuesta única de valor
Todos somos diferentes. Si, tú también eres diferente. No eres mejor o peor que nadie, pero eres diferente. Trata de explorar esa diferencia en aras de mejorar tu imagen de marca y el posicionamiento general de tu marca personal.
Cualquier persona que haya trabajado previamente tratando de posicionar una marca, sabe que dicho posicionamiento se basa siempre en oposición a la competencia.
Es decir, Apple es lo que es porque existe Microsoft, y viceversa. Cada uno trata de explotar sus cualidades, sin realizar un seguimiento de los valores del otro.
No pueden identificarte como “la otra XXXXX”. Tienes que conseguir ser única y diferente.
Por supuesto, no le vas a gustar a todo el mundo, pero es que de eso se trata precisamente.
Cuanto más trabajes en tu propuesta única de valor, conseguirás mejores y más fieles seguidores.
Ten tu propio tono de voz
Uno de los aspectos que más debes cuidar es tu tono de voz. Chequea qué está esperando encontrar tu público objetivo. No trates de comunicar en un tono demasiado técnico si tu público espera algo más coloquial, o viceversa.
Empatizar con el tono de voz de tu audiencia conseguirá muchos puntos a favor para el posicionamiento de marca personal.
Pero ¡ojo!, no te olvides del punto principal: propuesta única.
Dentro de ese “estándar de comunicación”, puedes ser la más técnica entre las coloquiales o la más coloquial entre las técnicas. Es un ejemplo tonto, pero si duda, creo que ilustra lo que pretendo explicarte.
Trabaja en cómo quieres enfocar tu visibilidad
En ningún momento del tiempo han existido tantas oportunidades para trabajar nuestra visibilidad como ahora. Existen multitud de herramientas a nuestro alcance, a muy bajo coste o gratuitas, para poder dar visibilidad a nuestra marca.
Escoge en qué eventos quieres estar, en qué redes sociales, cómo quieres diseñar tus espacios propios, tanto a nivel de página web, como locales de trabajo, redes sociales, etc.
Haz una lista de todos estos puntos que te dan visibilidad, y planifica cómo los vas a trabajar a favor de transmitir imagen de marca y posicionar tu marca personal alineada con aquellos objetivos y que destaque nuestra propuesta de valor.
Procura emocionar con tu marca personal
Lo hemos comentado anteriormente. Empatiza, empatiza, y empatiza. Es el primer paso para tocar la fibra sensible del público al que quieres llegar. Trata de emocionarles y tocarles. Que se puedan sentir reflejados en tí, o incluso que puedas llegar a darles una motivación aspiracional.
4 El posicionamiento de marca personal es a largo plazo
Cuida tu reputación. Una vez que tengas clara la estrategia de posicionamiento y arranques con ello, si comienza a darte los resultados esperados, insiste.
El posicionamiento de marca es una carrera a largo plazo en la que tienes que reforzar los aspectos que funcionan, y tratar de corregir aquellos que no lo hacen.
Por eso es muy importante que no trates de desviarte del guión establecido para no acabar defraudando a tu audiencia.
No hay nada peor que seguidores agraviados o que se sientan traicionados por una marca que les emocionaba, pero que en un momento dado ha acabado por defraudar.
Por esto es muy importante cuidar tu reputación, qué es lo que publicas y cómo lo haces. No todo vale.
5 Comparte tu historia
Pero no tengas miedo de compartir. No tengas miedo de hacer la “intrahistoria” de tu marca personal.
A cualquier público, cliente o consumidor, le gusta identificarse y emocionarse con marcas llenas de humanidad. Si tienes una historia de valor, seguro que merece la pena que compartas por qué estás haciendo las cosas, por qué te planteas una serie de objetivos y qué estás haciendo para conseguirlos. Verás que el enganche emocional se incrementa.
En definitiva, posicionar tu marca personal tiene que ver mucho con una palabra mágica: COHERENCIA. Si, en mayúsculas. Coherencia con el sitio al que quieres llegar dentro de unos años. Tener claro qué quieres conseguir, y trazar todas las migas de pan que aporten valor para ello… de una manera coherente.